El proyecto de restauración de la Muralla Nord y mejora a la accesibilidad de la Vila, se enmarca en un amplio proyecto de restauración de las laderas del Clariano a su paso por el centro histórico de Ontinyent, que pretende estabilizar las propias laderas sur del río, restaurar el paisaje una vez desaparecidas las antiguas fábricas que han dejado en estado inestable parte de las propias laderas, recuperar los solares de las antiguas fábricas como espacios abiertos y capaces de proponer accesos mecanizados a ciertas zonas de la parte alta de la Vila, a la vez que poner en valor el patrimonio arquitectónico y paisajístico de la ciudad, incluyendo en esta política la restauración del Pont Vell y sus desembarco norte.

En la ladera sur el proyecto se centra en una lectura amplia del paisaje donde el proyecto incluye las siguientes acciones: La estabilización de la ladera. Facilitar el acceso desde el barrio de la Vila hasta las proximidades del cauce del Clariano. La puesta en valor de los restos de la muralla.

La estabilización de la ladera ha sido la primera de las intervenciones y se ha centrado en tres puntos de gran impacto sobre el paisaje y la propia estabilidad de edificios y del propio desnivel sobre el que se implanta la Vila. Se ha intervenido en las quiebras del terreno en la zona de la Calle Trinidad, por medio de solidos muros anclados a las margas más profundas; muros acabados en una mampostería con piedra propia del lugar. Se han reconstruido en parte y saneado los muros del patio de la casa Barbera, lo cual ha necesitado de trabajos aéreos, anclajes de cierta magnitud y sustituciones del terreno para estabilizar las acciones sobre los muros, terminando esta zona con la estabilización del edículo extremo de la Casa Barbera existente sobre el precipicio, al ser este un elemento caracterizador del paisaje. A la vez se han sustituido y construido de nuevo los muros que separaban los patios de esta casa con los de la Casa de Cultura, construyendo rampas y escaleras para comunicar ambos patios, abiertos a su vez a la Calle Muralla y poder poner en servicio en su momento este conjunto, independientemente de la restauración de la Casa Barbera. Tras el patio de Cultura se ha estabilizado la ladera al Clariano con un sistema de mallas ancladas a las margas con un proceso de renaturalización del paisaje sobre el río.

El acceso a la Vila se sitúa lo suficientemente separado de los restos de la muralla medieval para que no incida sobre la escena de esta. Consta de una escalera y una torre vidriada con ascensor panorámico que permite el ascenso hasta media altura de la Vila, desde la zona de aparcamiento en la explanada de la antigua fábrica Tortosa y Delgado.

Por último, se está trabajando en la restauración de los restos de la muralla una vez estabilizada la zona par poder tener una plataforma de trabajo estable. La Torre dels Albellons y los estudios arqueológicos en proceso nos permitirán, conocer la altura de la muralla y el carácter de la misma, así como informarnos de las diversas fábricas con las cuales en el tiempo se ha construido o reconstruido la muralla.

AUTORES
Miguel del Rey, Antonio Gallud, María Teresa Santamaría

COLABORADORES
Francisco Vallet, arquitecto téctnico
Javier Yuste, Rodrigo Perez Cárcel, arquitectos colaboradores
VALNU, Ignacio Hortelano Uceda

PROMOTOR
Ayuntamiento de Ontinyent